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El fósforo es uno de los elementos más importantes para el metabolismo de los organismos vegetales, en las plantas preside las fases de floración y fructificación, por lo que es fácil imaginar su importancia para el huerto.
Este elemento es de origen orgánico, y si no se suministra mediante fertilización tiende a escasear debido a su consumo por las plantas de jardín. Una carencia de fósforo puede reconocerse observando cambios en el color de las hojas, en tonos rojizos o marrón violáceo.
El fósforo es uno de los nutrientes más importantes que necesitan las plantas de jardín, junto con el potasio y el nitrógeno se consideran los macroelementos clave para el suelo en la agricultura.
Fósforo en el suelo
El fósforo (P) es un elemento que se encuentra de forma natural en el suelo, debido a los numerosos minerales fosfatados (fósforo mineral) y a la presencia de materia orgánica (fósforo orgánico). El pH del suelo desempeña un papel importante a la hora de permitir que el sistema radicular absorba el fósforo, ya que condiciona la actividad de los microorganismos que transforman el elemento y lo ponen a disposición de laEste elemento es crucial para muchas operaciones vitales de las plantas, y la mayor demanda de esta sustancia se produce durante la floración y, sobre todo, durante la fructificación.
Ver también: El ojo de pavo real o ciclón de olivaCarencias y excesos de fósforo
Deficiencia Este elemento rara vez falta, está presente en prácticamente todos los abonos orgánicos y, salvo en el caso de suelos muy explotados, las carencias de fósforo no se producen en el jardín. Cuando falta fósforo, la planta tiene dificultades para crecer y formar raíces, deja de florecer y no forma frutos. Los síntomas externos que pueden indicar una carencia son una coloración anormal de laUn pH demasiado alto puede inhibir la absorción de este elemento y ser la causa de la carencia.
Exceso. La presencia de mucho fósforo en el suelo no sería un problema para la planta, si no fuera porque este exceso puede dificultar la asimilación de otros elementos importantes (como el hierro o el nitrógeno) y, por tanto, perjudicarla indirectamente.
Aportar fósforo con la fertilización
El fósforo está presente en todos los abonos orgánicos que se utilizan para los huertos ecológicos, y al esparcir compost o estiércol en el suelo también se añade fósforo, por lo que no es difícil aportar este elemento al campo que se va a cultivar. En agricultura, el abonado específico con fosfatos puede ser útil durante el verano para aumentar la floración de las hortalizas de fruto, pero no esuna operación que yo recomendaría hacer en el huerto. También porque hay que asegurarse de utilizar abonos de origen natural, permitidos en agricultura ecológica. Si se hace un buen abonado de fondo antes de sembrar, el fósforo aportado es más que suficiente.
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