Alessandra Taiano empezó a trabajar en agricultura en 2004, su formación se desarrolló con tres años de seminarios y ensayos prácticos en AgriBioPiemonte. En 2008, empezó a aplicar la práctica biodinámica en la granja de su pareja. Además del cultivo biodinámico, es jardinera en un castillo privado, donde también experimenta el mismo método natural en eljardinería ornamental, con resultados sorprendentes.

En julio de 2015 compró una pequeña granja llamada 4 Verdi, el número cuatro tiene un fuerte significado: de hecho, hay cuatro elementos (fuego, tierra, aire y agua), éteres (fuerzas formadoras y formadoras de vida) y estaciones. El color verde está en el vínculo con la naturaleza, siempre llena de vida en todo momento.

La granja de Alessandra se encuentra en los bosques de la zona de Monteorsello, un territorio equilibrado lejos de los cultivos intensivos. Hay bosques y setos, fauna, un pequeño lago: aquí la idea es desarrollar un verdadero organismo agrícola, coherente con la visión holística de la biodinámica. Los campos son sólo una hectárea y media, pero hay agua sin cloro...acueducto, aire no contaminado por el tráfico urbano y una atmósfera también libre de campos electromagnéticos.

Durante el primer año, Alessandra se dedicó a cuidar el suelo, a revitalizarlo restableciendo los microorganismos útiles. El humus para ello se obtuvo de un montículo biodinámico de 300 quintales con fermentación controlada, que luego se enterró.

Las primeras cosechas fueron de hortalizas: patatas, judías verdes, habas, guisantes, barbas de fraile, cebollas, ajos, acelgas y, sobre todo, calabazas, una fruta muy apreciada por Alessandra, que posee varias variedades antiguas, tan bonitas de ver como de comer.

En el segundo año, surgió la necesidad de sembrar trigo para disponer de harina para el consumo familiar. El trigo que se sembró, se cosechó a mano y se molió a la piedra tuvo un rendimiento muy interesante, tanto que se decidió prolongar el cultivo durante los dos años siguientes.

Para el futuro, Alessandra tiene previsto insertar colmenas para practicar la apicultura biodinámica, aprovechando el terreno de la granja con su lago como fuente de agua y proporcionando a las abejas plantas aromáticas y flores. Alessandra ya tiene dos certificados de apicultora, ahora es cuestión de pasar a la práctica.

En la apicultura biodinámica no se alimenta a las abejas con azúcar, sino que se les deja abundante miel para el invierno, a costa de un menor rendimiento. No se mata ni se cambia a las reinas, se fomenta la enjambrazón y no se utilizan excluidores de reinas para el bloqueo de la cría. No se utilizan láminas de cera preimpresas en los marcos, porque las abejas se curan y se fortalecen con la producción de cera. La ideapor tanto, es producir una miel que respete el organismo de la colmena.

Las plantas aromáticas, además de servir a las abejas, se cultivarán para obtener aceite esencial; en el mismo campo, también está prevista una producción de azafrán biodinámico. Las fresas biodinámicas se producirán en cajas de humus.

El establo incluido en la granja albergará dos vacas y dos terneros, que dispondrán de un prado cercano, mientras que el bosque vallado albergará animales de corral para huevos y carne. Para las gallinas, la idea es un proyecto de huevos en el bosque.

Un pequeño invernadero permitirá producir plantones de hortalizas, así como apoyar el cultivo biodinámico de verduras, que favorece variedades particulares.

Todo este proyecto está en marcha, de momento Alessandra pone a la venta su harina molida a la piedra y sus patatas, si todo va bien paso a paso este proyecto irá tomando forma, así que solo nos queda desearle lo mejor.